Pasarán horas donde el insomnio no cede y en esos largos minutos de espera y tormento Una esperanza que ha de iniciar. Aunque nunca Habrá algo más que noté esa ausencia que, sentir el rostro empapado, la vista nublada,para que serviría pedir ayuda..
Hay un músico perfecto, un poeta que anhela a no volver a escribir, su tortura era sus propios versos de verdad y exaltación Esencial.
Dan permaneció inmóvil en la mecedora , doliéndole el pecho nisiquiera podía respirar Correctamente, entre las lágrimas que él aguardaba y no le bastaban, se había hecho ha la idea de que sería sólo esa última noche su determinación. Era incurable, ahí es cuando uno quisiera dar un consejo , pero inútilmente no podemos, sabemos que mentiríamos todo es igual, Dan quitándose los lentes los ponía en la mesa, él no podía ver nada por completo, y se hizo la interrogante ¿Es cómo si pudiera leer así ahora? Iluso, soy un iluso.
El alba le gano más que este pensamiento
Errante, se levantó tomo su bastón y se fue aún parque, se sentía peor que un desahuciado
Iba añadiendo efectos ha ese mundo, como lo diría él . Mi mundo Lo mejoro para ella, estando en el parque no veía nada más que ojos que no podían ver lo primordial, era insensatos aún ..
En una avenida atrapó un recuerdo ajeno, una señora de alta edad, muy favorable y de clase en su presencia ,se apreciaba que era diferente,Vaya ¡¡Muy diferente!!
Sólo la vió y eso le bastó, su labio de ella formaba un tierno abrazo, su reloj decía que era un frío y fabuloso de diciembre, su pelo refulgente en varias capas y por último sus ojos de un color esmeralda , eran símbolo de lo pequeños y lo que los cubren las pestañas, podés tener ojos, pero indudablemente sin esas pequeñas pestañas no verias...
Él sonrió y a paso muy lento regreso a su hogar,al llegar un arcoíris vislumbro quésería lo único para cerrar aquel día, no era tan lejano ni dado a conocer, y en las sombras de su habitación el decidió ir a la cama ,ya no temía podía estar acostado sin ella.
Samuel Garay Ávila
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